Descripción del Padecimiento

El padecimiento ocular que denominamos astigmatismo tiene su origen en un defecto en la curvatura de la córnea (película transparente que se encuentra delante del ojo), lo que impide el correcto enfoque de los objetos, tanto cercanos como lejanos. En este defecto ocular la córnea, en vez de ser redonda, se achata por los polos, apareciendo distintos radios de curvatura en cada uno de los ejes principales. Debido a ello, cuando llega la luz llega al ojo, la imagen que se percibe es poco nítida y distorsionada. En un ojo normal, la córnea es esférica (como un trozo de balón de baloncesto). En un ojo astigmático, la córnea es achatada (como un trozo de balón de rugby). La dirección de ese aplastamiento determina el eje del astigmatismo.

¿Cuáles son los síntomas del astigmatismo?

Los síntomas de astigmatismo pueden incluir visión borrosa o áreas distorsionadas en la visión, fatiga visual, dolores de cabeza, entrecerrar los ojos para tratar de ver con claridad, o molestias en los ojos.

¿Quiénes se ven afectados con mayor frecuencia?

Aunque el origen de la cobertura de las corneas no está totalmente establecido, este defecto ocular tiende a ser hereditario ya que algunas personas nacen con un ligero componente astigmático, que en la mayoría de las ocasiones no precisa corrección. Otras, en cambio la desarrollan a medida que envejecen, producto de la pérdida de flexibilidad de la cornea. Excepcionalmente, se puede producir después de un transplante de córnea o cirugía de cataratas.

¿Cómo puede corregirse el astigmatismo?

Luego del diagnóstico del astigmatismo, realizado por el oftalmólogo, este defecto ocular se puede corregir mediante anteojos, lentes de contacto e incluso cirugía por láser (Lasik, PRK). Esta última es cada vez más segura, liberando de la dependencia de los otros métodos de corrección del astigmatismo

Previo a la cirugía LASIK el oftalmólogo debe realizar un examen completo de sus ojos para asegurarse que usted no sufre alguna enfermedad (glaucoma, queratocono y otras enfermedades oculares) o condición que impida realizar el procedimiento o empeore el pronóstico. Por ello, es de vital importancia realizar una topografía corneal computarizada y una paquimetría. Estos dos exámenes permiten al especialista LASIK conocer la forma y espesor de su cornea para planear la cirugía y descartar algunas enfermedades no detectables en el examen inicial.